sombras de un sueño que perseguimos...

Tantas veces la lluvia se ha precipitado en mi rostro y se ha confundido con mis lágrimas, quizás nadie puede entender el porque de esas lágrimas, porque para llegar a hacerlo sólo hay que conocerle.
Esa noche me encontré así, sin más frente a él, como si fuera una persona cualquiera, pero con el tiempo me di cuenta de que él sería el único capaz de marcar mi vida, de enseñarme lo que no enseñan los papeles, él sería el único en darme la vida y de quitármela por segundos.
Mi vida empezó a girar con él, con cada palabra, con cada sonrisa, con cada intento de superación, mi vida fue él. Intenté no caer porque nadie quiere golpes, pero empecé a ver su sonrisa por la noche, en las sombras, empecé a identificar sus gestos en gente completamente ajena a mi. Empecé a darme cuenta de que era lo que necesitaba, me resultaba necesario para vivir. 

Alguien quizás piense que era obsesión, pero no, la diferencia era que no aprendí a vivir con él, sino de él y cuando no estaba que me quedaba? simplemente nada, no había sonrisas, no había esperanzas, no había nada.
Debería dejarlo todo en manos del tiempo y empezar a vivir el momento, porque toda espera es dura, porque todos creemos que cuando tengamos algo más seremos felices, pero al final no es así, porque seguimos esperando más y más y establecemos un circulo vicioso en el que aspiramos a la felicidad pero no nos damos cuenta de que la tenemos en nuestras manos...
Todo queda en eso, en palabras, porque yo soy la primera que intenta aplicarlo pero que no sabe como, que si que cuando estoy con mis amigas me puedo reír y pasarme mucho tiempo llorando y siempre de la risa, disfrutando el momento, pero también sé que no puedo ser completamente feliz si no le tengo ahí, tal y como necesito.

"La Gloria y el Amor tras que corremos, sombras de un sueño son que perseguimos…"